
Tuvo lugar con solemnidad a la hora 0 del 10 de octubre en la Plaza
Avanzaron las columnas de las fuerzas armadas convertidas en poderosas tropas élites bajo la dirección del gran Partido y volaron aviones demostrando el invencible poderío de la aviación. Las columnas motorizadas, de artillería y de cohetes desfilaron manifestando la fuerza justa e inagotable y la potencialidad militar de la República.